Si quieres realizar una buena limpieza en tu hogar y necesitas hacerlo de manera sencilla, rápida y efectiva, existe un ingrediente ideal, que además es accesible, económico y que probablemente tienes en tu hogar.
El ingrediente del que hablaremos hoy es el bicarbonato de sodio, ese compuesto color blanco cristalino que se utiliza para recetas de cocina, para desinfectar, para neutralizar, para blanquear y mucho más.
1. Limpiar acero inoxidable
El acero inoxidable solemos encontrarlo en las piletas de cocina o en las mesadas, pues es un hermoso material para cocinar, colocar elementos de variadas temperaturas y más. Este material es muy útil, pero también suele engrasarse y el bicarbonato lo podrá solucionar.
Necesitas:
- 3 cucharadas de bicarbonato de sodio
- Agua
- Cepillo de cerdas suaves
- Esponja
- Paño de microfibra
Paso a paso:
- Lo primero que debes hacer es limpiar la superficie que quieras limpiar con el paño de microfibra para no arruinarla.
- Luego deberás esparcir las 3 cucharadas de bicarbonato sobre la misma.
- Frota con el cepillo de cerdas suaves para que se impregne mejor en la superficie.
- Por último, debes enjuagar con abundante agua y una esponja.
- Secar con el paño de microfibra.
2. Quitar manchas de la ropa
El bicarbonato también es súper efectivo y de alta productividad en lo que respecta a las manchas de la ropa. Muchas veces nos manchamos con comida, bebidas y más, y es conveniente actuar a tiempo. Si lo haces con bicarbonato podrás solucionarlo rápidamente.
Necesitas:
- Bicarbonato de sodio suficiente para cubrir la mancha
- Esponja
- Agua
Paso a paso:
- Lo primero que debes hacer es extender la ropa sobre alguna superficie cómoda.
- Luego debes aplicar el bicarbonato de sodio en polvo sobre la mancha que quieres quitar.
- Espera 10 minutos a que haga efecto.
- Frota con la esponja y un poco de agua.
- Y por último, enjuaga por completo y ponlo a secar.
3. Limpiar tazas y vasos
¿Te ha pasado que una de tus tazas o vasos preferidos toman un color amarillento o marrón?, esto es causado por el té, el café y otras infusiones de color fuerte que tiñen el material de los mismos, pero no te preocupes, el bicarbonato lo resolverá.
Necesitas:
- 1 cucharada pequeña de bicarbonato de sodio
- Cacerola
- Agua
- Esponja
Paso a paso:
- Debes vaciar la pileta de tu cocina y colocar las tazas o vasos que desees limpiar sobre la misma.
- Una vez que tengas esto deberás en una cacerola hervir agua.
- Cuando el agua esté caliente debes colocar la cucharada de bicarbonato de sodio dentro de la taza o vaso y llenarla con agua caliente.
- Debes dejarla unos minutos para que haga efecto.
- Luego debes vaciarlas y frotar con la esponja.
- Y por último, enjuagar con abundante agua y ponerlas a secar.
4. Quitar el sarro del inodoro
Existen diferentes maneras de realizar esta acción, pero la más fácil y efectiva que te podemos compartir es esta combinación de bicarbonato de sodio con jugo de limón que no solo quitará el sarro del inodoro, sino que también neutralizará el olor y lo blanqueará por completo.
Necesitas:
- 4 cucharadas de bicarbonato de sodio
- Jugo de 1 limón
- bowl o recipiente pequeño
- Agua
- Cepillo de cerdas suaves
Paso a paso:
- Lo primero que debes hacer es colocar en un boul o recipiente pequeño el bicarbonato de sodio con el jugo del limón y mezclar
- Una vez que logres una pasta homogénea deberás aplicarla sobre las superficies del inodoro que posean sarro
- Deberás dejar que actúe la mezcla por unos minutos
- Luego de que este tiempo pase, deberás frotar con el cepillo de cerdas suaves para ayudar a eliminar el sarro
- Y al final deberás tirar la cadena para que corra el agua y elimine los restos de la pasta de bicarbonato de sodio
5. Dar brillo a tus cubiertos
Los cubiertos con el tiempo se van gastando y van perdiendo su brillo natural, al igual que otras ollas o sartenes, pero el bicarbonato de sodio también podrá ayudarte a recuperarlo y que luzcan como nuevos.
Necesitas:
- 3/4 taza de bicarbonato de sodio
- 1/4 taza de agua
- esponja
Paso a paso:
- Mezclar el bicarbonato de sodio con el agua y generar una pasta.
- Una vez que la tengas, debes untar los cubiertos con la pasta.
- Déjala unos minutos (si necesitas más cantidad, duplica las proporciones).
- Y por último, con una esponja frota los cubiertos y lávalos con abundante agua.
Si te gusta nuestro contenido compártelo