Los bloques de vidrio son únicos en el sentido de dejar filtrar la luz y brindar privacidad, lo que los hace un material ideal para los baños.
Además de lucir preciosos, los bloques de vidrio son muy resistentes, tanto a los golpes como a los cambios de temperatura. Esto permite que se puedan instalar en prácticamente cualquier lugar, sin importar sus condiciones climáticas.
También reducen la transmisión de calor entre ellos y sucede lo mismo con el frío. De este modo, podremos conseguir habitaciones más frescas en verano y más calientes en invierno, lo que los hace una opción ideal para el baño, que a veces se torna muy caluroso o frío, dependiendo el clima.
Funcionan como aislante a nivel térmico, ofreciendo protección acústica y evitando que pasen los ruidos. Entre bloque y bloque de cristal hay una cámara de aire, lo que posibilita que el aislamiento sea mejor que el de un bloque macizo.
Otra de las principales ventajas tiene que ver con que permiten el paso de la luz, lo que hará que la zona luzca más amplia. Los expertos calculan que permiten hasta un 85% de paso a la luz natural.
Por norma general, podríamos diferenciar las siguientes variedades:
- Neutros: como su nombre indica, se trata de un tipo de block de vidrio incoloro.
- Con texturas: la principal diferencia aquí está relacionada con el diseño, ya que incorporan texturas a la superficie que los hace diferentes.
- Metalizados: acabados con metal para dar otras formas o características al bloque.
- Con colores: también los hay de diferentes colores, de manera que podamos conseguir composiciones realmente espectaculares y llamativas.
- Vidrio block decorado: son los más creativos, ya que incluyen diseños de todo tipo en su superficie. Desde texturas y colores, hasta dibujos o patrones diferenciados.
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