Obtener o construir una vivienda propia no es nada fácil, y Dóris Días y Robson Lopes, originarios de Foz do Iguaçu, Brasil, lo saben perfectamente.
A tan solo seis meses de casarse, la pareja empezó a tener problemas económicos debido a que ambos se quedaron sin empleo: Robson perdió su trabajo en un supermercado y Doris tuvo que abandonar su puesto de educadora social por motivos de salud.
No contaban con los ingresos suficientes
Sin ingresos, sin ahorros y sin posibilidad de adquirir una vivienda, tuvieron que pensar en una alternativa para tener su propio hogar. La pareja se mudó a la casa de los padres de Doris con la intención de construir una casa en el mismo terreno; sin embargo, todas las opciones superaban por mucho su presupuesto.
Una buena idea surgió inesperadamente
Es muy caro comprar mampostería y material de madera. Fui tras un autobús para vivir, pero no funcionó. Busqué un contenedor (para transportar material) y vi que también pasaba el presupuesto. Estaba molesta y comencé a mirar las botellas y las botellas me miraron a mí. Recordé que vi casas construidas así en otros lugares, pero necesitaba poner arena adentro y gastaría aún más. Investigué un poco y vi algunas con botellas de vidrio y que, después de ser construidas, ni siquiera parecían estar hechas de esa manera.
Lo hicieron con sus propias manos
Al encontrar la solución perfecta, ambos empezaron a recolectar botellas. Para acelerar el proceso compartieron su iniciativa en redes sociales donde con el apoyo de amigos y extraños, lograron acumular más de 10 mil piezas.
Luego de juntar el material necesario, pusieron manos a la obra. Ellos mismos construyeron poco a poco su futuro hogar: prepararon el piso, crearon estructuras de madera y juntaron una por una las botellas con cemento y arena para elevar los muros. El resultado fue una propiedad de 70 m cuadrados con una sala, cocina y dormitorio.
La construcción no ha terminado
La casa aún no está terminada ni tiene techos; Doris y Robson han contado con la ayuda de familiares y amigos para completar la estructura. También han pedido apoyo a través de las redes sociales para conseguir muebles y por fin ver realizado su mayor sueño.
No es la primera vez que lo hacen
No es la primera vez que recurren a los materiales reciclados; el día de su boda todo fue sustentable.
Toda la decoración de mi boda fue hecha con materiales reciclables. Fue muy hermosa. Fuimos a recoger en la calle las botellas y les pedimos a los amigos que las trajeran a casa, hicimos campañas en la red social y ahora nuestra casa es así.
Esperemos que muy pronto su hogar quede listo para que puedan iniciar una vida linda y llena de amor.
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