Cuando cultivamos rosas por medio de esquejes, el factor clave que determinará el éxito del crecimiento de raíces será la humedad.
Es por eso, que el papel higiénico será de gran ayuda para mantener la base de nuestro esqueje húmedo y en condiciones para desarrollarse.
En este artículo te mostramos cómo reproducir rosas por esquejes fácilmente:
Paso 1
- Elegir un esqueje que se vea saludable.
- Una vez que lo hemos seleccionado, con la ayuda de una tijera bien afilada y desinfectada, cortaremos los tallos de aproximadamente 20 cm de largo.
- Luego, pasaremos a limpiar el esqueje, retirándole todas las hojas y cortando ambos extremos con un corte de 45°. Podemos cortar la punta de las espinas para no pincharnos al manipularlo.
Paso 2
- Tomaremos uno de los extremos del esqueje y lo enrollaremos con 4 capas de papel higiénico. Solo debemos enrollar la mitad, de lo contrario le faltará oxígeno al tallo y no brotarán las raíces.
Paso 3
- Una vez que ya tenemos todos los tallos envueltos, les rociaremos agua con la ayuda de un atomizador. Haremos esto para que el papel se adhiera bien al tallo.
- Tomamos los esquejes y los acomodamos en una maceta con 1/4 de tierra. A medida que los vamos acomodando, debemos tener cuidado para que ningún papel se salga, ya que esto es lo que mantendrá la humedad en el tallo para el enraizamiento.
- La tierra que vayamos a utilizar para la maceta debe ser una mezcla que facilite el drenaje.
Paso 4
- Terminaremos cubriendo los esquejes con un poco más de tierra, pero te aconsejamos que solo lo hagas por la mitad. Luego, regaremos a modo de lluvia para dejar bien humedecida la tierra.
- Por último, ubicaremos la maceta en un lugar en donde reciba mucha luz, pero no directa del sol.
- Regaremos regularmente en forma de lluvia para mantener la tierra un poco húmeda.
Paso 5
- Aproximadamente a las 4 semanas comenzaremos a ver las primeras hojitas.
- Retiraremos con mucho cuidado los esquejes de la maceta, quitamos el papel y constataremos el estado de las raíces. De seguro ya tendrán un par, nuestros esquejes ya estarán listos para convertirse en planta.
- Enjuagaremos uno por uno para retirar el resto de papel adherido, y una vez que las raíces ya están limpias, pasaremos a plantarlas en maceta o directamente en el jardín.
Cómo cuidar un rosal
- Las plantas de rosas necesitan ser abonadas, necesitan los nutrientes que tiene la materia orgánica, tales como el humus de lombriz, el potasio y el nitrógeno.
- Cuando vayamos a abonarlas recordemos que sólo se hace al comienzo de la primavera. Se debe hacer en esta estación del año porque es cuando los rosales comienzan a desarrollarse y a concentrar toda su energía en florecer.
- Con que les demos un riego profundo cada 3 a 4 días estarán bien, se aconseja un riego profundo y abundante tratando siempre de evitar los riegos diarios con poca agua.
- Otro factor a tener en cuenta cuando tenemos rosales, son las plagas. La rosas son susceptibles al desarrollo de hongos y al ataque de pulgones, por lo que debemos prestar atención y revisar siempre sus hojas y tallos. Si notas que cambian de color o se ven marchitas toma las medidas necesarias para combatir la plaga lo antes posible.
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