Actualmente muchas personas optan por la propia elaboración de productos como jabones, cremas corporales, etc.
Esto se debe al gran ahorro económico, ayuda al medioambiente y evitamos ciertos químicos nocivos en nuestra piel.
El jabón casero se utiliza desde la antigüedad, y personalmente me agrada más que los jabones comerciales, ya que deja la piel muy suave, al contrario de los jabones comerciales que la resecan.
A continuación, te mostramos cómo puedes elaborar jabón casero fácilmente:
Necesitas:
- 1 lt de aceite de cocina
- ½ lt de agua
- 150 g de sosa cáustica
- ½ cda de sal
También se pueden añadir: - 50 ml de aloe vera
- Colorante
- Aceites esenciales
Nota: Se necesita una cuchara larga de madera o plástico (no metal) y un recipiente grande de las mismas características o de acero inoxidable. También necesitas unos moldes de madera o plástico con formas para el jabón.
Elaboración:
1. Calentamos el aceite y el agua en recipientes separados hasta que lleguen al punto de ebullición.
2. Tomamos el agua y la vaciamos en el recipiente que tenemos para preparar el jabón, luego añadimos la sosa cáustica y la sal, y revolvemos hasta su total disolución.
Nota: Añadir primero el agua y luego la sosa cáustica, nunca a la inversa porque se produce una reacción química que nos produciría quemaduras en la piel ya que llega a los 80º C.
3. Añadimos lentamente el aceite (que estará caliente pero no hirviendo) y revolvemos de manera constante y en el mismo sentido para evitar que se corte el jabón hasta que adquiera una consistencia de puré.
4. Vertemos el jabón en los moldes. A continuación, ponemos los moldes en un lugar cálido y seco durante unos 2 días para que se solidifique.
5. A los 2 días ya podemos desmoldar el jabón, pero no se podrá usar hasta pasado 1 mes, ya que la sosa cáustica es perjudicial hasta pasados los 30 días.
Consejos:
- Trabajar en un lugar bien ventilado
- Usar gafas, mascarilla y guantes protectores
Este video muestra el proceso de elaboración del jabón casero:
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