Cocinar en una cazuela u olla de barro es una de las tradiciones más emblemáticas de la cocina mexicana. Sin embargo, antes de ser usadas por primera vez, deben pasar por un proceso que se llama “curación”.
Antes de usar tu cazuela de barro por primera vez es importante que sea curada, esto ayuda a cerrar los poros de la cazuela para que resista el calor y otros cambios de temperatura, de lo contrario, podría estrellarse o romperse cuando estés cocinando.
Al curar tus ollas o cazuelas de barro, también ayudarás a que los alimentos no tengan sabor a arcilla.
Cómo curar cazuelas y ollas de barro 
Con Plátano
- Pela un plátano y frota toda la pulpa por toda la superficie de la cazuela, si la pulpa no es suficiente, utiliza también la cáscara. Si tu cazuela u olla de barro cuenta con tapa debes hacer lo mismo con ella.
- Deja secar la olla o cazuela cubierta con la pulpa del plátano, bajo la luz directa del sol.
- Una vez seca bajo los rayos del sol debes calentar al máximo la cazuela, puede ser en un fogón, o puedes colocarla en el horno a temperatura máxima por 30 minutos.
- Deja enfriar la olla o cazuela, una vez que esté a temperatura ambiente, limpia cualquier resto de plátano que tenga y lávala bien. Una vez que se haya secado a temperatura ambiente, estará lista para ser utilizada por primera vez para cocinar.
Con Ajo
- Lo primero que debes hacer es dejar la cazuela sumergida en agua fría de 12 a 15 horas.
- Transcurrido el tiempo, saca la cazuela del agua y pasa un ajo por toda la superficie, esto ayudará a cerrar los poros del barro que hayan quedado abiertos durante su fabricación.
- Deja secar y llénala con agua, ponla en el fuego y deja hervir hasta que se consuma un poco de agua.
- Retira del fuego y deja enfriar, una vez que ya está a temperatura ambiente, lávala bien para poder usarla por primera vez.
Es importante que si ha pasado mucho tiempo desde la última vez que usaste tu olla o cazuela de barro se vuelva a curar la olla o cazuela.
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