Diciembre marca la llegada de una de las épocas más especiales del año, la Navidad. Y con ella, la oportunidad de tener una de las plantas más bellas que existen, que es la flor de nochebuena.

Sus pétalos color rojo intenso son uno de los grandes símbolos de las fiestas decembrinas y sirven de adorno para nuestros hogares. Pero hay una manera de seguir gozando de su belleza a lo largo de los meses posteriores.

La flor de Nochebuena no tiene por qué ser exclusiva de Navidad. Puedes gozar de su belleza si la plantas en tu jardín para seguir admirando su belleza y color a lo largo del año. Esta planta mexicana se ha convertido en todo un símbolo navideño a lo largo del año, pues tiene una belleza natural que la destaca de muchas otras plantas similares.

La flor de nochebuena florece y crece en todo su esplendor cuando la sacamos de su maceta y la colocamos en espacios más amplios como los jardines.

La mejor época para traspasar tu flor de nochebuena de la maceta a tu jardín es en verano, cuando el frío ha pasado y las condiciones se dan para que la flor se adapte a otro entorno. Aunque hay que decir que otras fuentes aseguran que se puede trasplantar también entre los meses de enero hasta marzo aproximadamente. Nosotros aconsejamos que sea a partir de marzo cuando las temperaturas son muchos más cálidas.

Poda los tallos de la flor a 10 centímetros de la base, por encima del nudo de las hojas. Después aplica una pasta cicatrizante que puedes adquirir en invernaderos o en otros sitios donde venden flores.

Elige algún sitio donde la flor reciba luz por las mañanas y sombra por la tarde. También es importante que se mantenga alejada de los vientos fuertes, pues es una flor frágil y delicada.

El siguiente paso es cavar un hoyo de unos 30 cm. Esto ayudará a que la raíz quede cubierta. Introduce la flor de nochebuena en este espacio y extiende la tierra alrededor de su tallo.

Coloca un fertilizante a su alrededor (lo puedes adquirir en alguna tienda especializada en jardinería o un invernadero). También no debes olvidar que necesita de un sustrato, el cual debe ser rico en sustancias orgánicas y contener turba.

Si te gusta nuestro contenido compártelo